La mesoterapia corporal profunda es un tratamiento médico muy utilizado para solucionar las patologías de carácter estético como la celulitis, los trastornos circulatorios, la alopecia y las afecciones de la piel, entre otras. Se trata de un método muy eficaz siempre que se realice en las condiciones adecuadas y con las composiciones correctas.
Una vez que los compuestos de la mesoterapia son inyectados en la zona que circunda al tejido adiposo que se va a eliminar, la sustancia se irriga para favorecer la circulación sanguínea y linfática, además de ayudar a la degradación de los triglicéridos. De esta manera, los adipocitos se van soltando poco a poco hasta disolverse completamente, para luego drenarlos por el organismo.
Tanto la duración del tratamiento como los métodos complementarios dependen de los requerimientos anatómicos de cada persona. Por eso algunas logran su objetivo en seis sesiones y otras requieren hasta 48, aunque el promedio de aplicaciones suele ser de doce.
Por otra parte, la mesoterapia se puede aplicar en cualquier parte del cuerpo, salvo en los senos. Incluso el rostro se beneficia notablemente con esta técnica, ya que se utiliza un complejo de micro inyecciones de vitaminas que regeneran y estimulan las células de colágeno y elastina, y además reafirman los músculos.
La mesoterapia, es un tratamiento que consiste en administrar pequeñas dosis de productos homeopáticos o medicamentos en la primera capa de la dermis (justo debajo de la piel), mediante inyecciones que no provocan ninguna molestia y es un modo eficaz de hacer frente a la celulitis.
Consiguiendo una disminución progresiva en las zonas afectadas por la celulitis en unas diez sesiones, actuando directamente sobre el tejido adiposo liberando el exceso de grasa y toxinas.
La celulitis es una guerra continua para muchas mujeres independientemente de su figura, dieta o si tienen sobrepeso o están delgadas. Y después de probar mil y una cremas así como tratamientos, pueden recurrir a la mesoterapia.
Las partes del cuerpo que más suelen acumular grasa y que más incomodan a las mujeres son: flancos, muslos, papada, glúteos y abdomen.
Después de las inyecciones es recomendable dar un drenaje linfático manual para estimular la eliminación. Al finalizar cada sesión es importante beber mucha agua para que el cuerpo libere las toxinas que se desprenden con el tratamiento.